Pues sí, ahora que el 2014, en su tramo final, nos está demostrando que las cosas van a cambiar más bien poco, tenemos que ser conscientes de lo importante que es echar unos cuantos euros en la hucha y acumular unos ahorros para afrontar la que se nos viene encima. Que parece que hemos olvidado dónde nos encontramos con tanta prima de riesgo y tantos números rojos asomando aún en la bolsa. Vale, de acuerdo, la cosa parece haberse dulcificado, pero nadie podría decir con certeza que estamos fuera de la crisis.
Para ahorrar dinero en esta época tan dificultosa hemos de tener claras las preferencias. ¿Qué queremos decir con esto? Pues ni más ni menos que debemos ser conscientes de que se puede ahorrar y de que lo podemos hacer con sencillos gestos cotidianos. Y, por supuesto, deshaciendo esas ridículas prevenciones que nos hemos montado en la cabeza.
Por ejemplo, si sufrimos una avería y hay que comprar un repuesto, ¿por qué no acudir a un desguace? En estos lugares no solamente te ofrecen calidad al mejor precio, sino que además también te permiten vender tu coche siniestrado o un vehículo que tengas inservible en la cochera de tu casa. De hecho, las empresas han entendido que no hay que ofrecer únicamente piezas comunes, sino también darle al usuario motores de segunda mano o cajas de cambio reparadas. Y como estos negocios aplican muy bien todos los estándares de calidad habidos y por haber la conclusión a la que podemos llegar es el hecho de llevar a cabo una compra con todas las garantías de satisfacción y funcionalidad.
Otra cuestión: las marcas blancas. Sí, ya sabemos que algunas no son recomendables porque tienen poco sabor o una calidad relativa, pero otras son excepcionales. Y en tiempos de crisis lo mejor es alternar tus marcas de confianza con esos otros productos que son baratos y que permiten llenar tu carro de la compra casi hasta arriba por poco dinero.
Si eres un amante del cine ¿por qué no aprovechas las ofertas que hay? El día del espectador es una excelente manera de ver tus películas favoritas por poco dinero, y en algunas salas se regalan las palomitas en días de semana. Aprovecha esta situación y date un homenaje, seguro que te lo mereces.
Como ves de lo que se trata es de aprovechar bien el dinero que tienes y de no despilfarrarlo ni malgastarlo. Digamos que tenemos que aprender a comprar y a ahorrar. No queremos decir con esto que comas de mala manera o elimines ciertos alimentos de tu dieta, o que tengas que dejar tu coche en el dique seco si no funciona el motor. Pero está claro que para echar en la hucha algunas monedas es necesario actuar con firmeza, ¿no crees?