Cambiarla por un plato de ducha

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Hace diez años compré una casa a las afueras de Barcelona, la casa estaba genial, muy bien conservada y cuidada, la tenían un matrimonio sin hijos que le hacían un buen mantenimiento, la vendieron porque ya se estaban haciendo mayores y no podían subir a la segunda planta donde están los dormitorios, una pena porque la pareja había vivido en esta casa los mejores años de su vida, pero en fin, con mucha pena la pusieron en venta, yo no tenía en mente comprar un casa tan grande pero, cuando la vi, me enamoré, con una cocina súper amplía y con mucha luz natural ya que tiene un gran ventanal que da a un patio precioso en el que pasar la tardes de primavera leyendo un buen libro.

Lo único que no me convencía mucho era que tenía una bañera en el baño del segundo piso que no se por qué no me gustó nada, por lo que decidí cambiarla y ya que te pones a reformar, pues en lugar de bañera colocas un espacioso plato de ducha con una mampara bien bonita, la pega de todo esto es que pensarlo e imaginarlo es muy fácil, pero cuando te metes en algo así ya sabes que se va a organizar una buena, Lo primero es buscar presupuestos gratis de empresas de reformas, afortunadamente hay varias que dan muy buen presupuesto y te dan garantía de que todo va a ser rápido y barato.

El cambio de bañera a plato no es tan sencillo, por ejemplo el suelo, como no haya baldosas iguales a las que tienes en el baño tendrás que elegir suelo nuevo, y que me dices de los azulejos, ya no es solamente el hueco de la mampara, hay que alicatar toda la habitación, ya que estaba metida en la reforma aproveché para cambiar el mueble del lavamanos y puse uno con dos lavabos, para evitar colas de espera en la puerta del baño para cepillarse los dientes o para lavarse las manos ya que nos juntamos cinco personas en casa y todos nos lavamos a la vez. Con una estantería a juego y un porta velas bonito, conseguí un cuarto de baño con encanto y muy funcional. Me costó un poco más de lo que yo esperaba pero estreno baño y con los azulejos que a mí me gustaron y los muebles que yo elegí. Ahora a disfrutarlo.